martes, 15 de mayo de 2012

Amor.

-¿Qué te pasa?

-Nada.

-De acuerdo, me tengo que ir. Adiós.

-Adiós...

Impecable cuestiones que nos entran en ese instante segundo en el cual nos preguntamos; ¿ De verdad me quiere? ¿ Soy importante? No y más no. 



Días sin comer, noches sin dormir, y horas sin sonreír. Tengo el corazón roto, roto de decepción, de desamor. Por mis venas está corriendo un líquido negro, me está quemando por dentro, pero no me duele, siento como mi cuerpo se consume poco a poco, joder, me está matando. 

Me gusta tanto el alivio de la muerte, saber que voy a morir y no volveré a molestar a nadie, que ya no existiré y que todo lo que he vivido  sen extinguirá junto a mi recuerdo, ya que nadie me recordará,me siento tan feliz... El dolor de la muerte me hace feliz.

Ojalá todo esto acabe pronto... 

lunes, 14 de mayo de 2012

Jaamás.

Jamás volveré a desperdiciar mi tiempo por alguien que no me quiere, porque no vale la pena estar noches en velas para que el día siguiente ni te hable. Jamás volveré a desperdiciar mi tiempo con aquellas personas que no me quieren, porque yo sí que me quiero. Jamás volveré ha pensarte, porque no te mereces que te piense, te aseguro que nunca jamás te volveré a querer, porque ya no te quiero.

sábado, 12 de mayo de 2012

sensaciones....

-oh...

No pude decir nada más en ese instante, me atravesó el corazón instantáneamente. Nunca había sentido tanto dolor, o sí, tal vez aquel día que te vi desaparecer a la vuelta de la esquina, corrí corrí por ti, te agarre y te pedí que pararas.

Me ignoraste.

Entonces comprendí que tu rencor volvía a apoderarse de ti, no hice nada, tan solo te seguí te acompañaba a unos pasos por detrás y veía como caminabas, como huías de mi...

Oh, todavía recuerdo las ganas que me entraron de besarte cuando te agarré del brazo y te giraste con esa mirada de odio y dolor, eras tan bonita.

Te acuerdas cuando te iba a buscar a la parada de guagua te hacía caminar un kilómetro pero que para ti eran como diez y nos pasábamos toda la tarde tumbadas en el césped... Yo sí, y todavía lo recuerdo como si fuera ayer... uno de los pocos recuerdos que me quedan en mi subconsciente... Ojalá se me hubiese borrado como todo los demás. Ojalá.



Apagada, frío y con olor a humedad. Las paredes son de color gris, un gris bastante oscuro, su pintura se está callendo lentamente. Su textura da asco, parece que estás tocando moho. Me acerco un poquito más y lo huelo... 

Huele a muerte. 

La muerte tiene un olor... agrio pero dulce, triste pero feliz, agobiante y aliviador.

Te noto, sé que estás a mi lado, pero ¿Por qué no te puedo ver?  ¡Dónde estás! por favor...háblame...
 Me estás tocando, noto tus dulces manos cálidas rodeando mi torso... agárrame más fuerte por favor, te necesito...