Te quiero. Sí, te quiero pero no te quiero por querer, te quiero como un poeta a sus poesías como un pintor a sus cuadros, te quiero porque eres la creación del amor.
Cuando yo he caído tu has estado ahí conmigo, para levantarme para animarme. Cuando yo he llorado tu has estado ahí para secarme las lágrimas, porque incluso cuando tenia el alma rota tú me la cosiste con amor.
Eres mi respiración, eres mi alma, eres mi voz... no quiero que te separes de mi nunca, quiero que siempre estés ahí a mi lado, para poderte ver crecer, para poderme enamorar más de ti cada segundo de mi vida un poquito y otro poquito más.
Cada mañana, cuando me levanto siento como mi alma te nombra, abro los ojos con desesperación buscándote a mi lado, pero no estás. Salgo de mi casa, y cuando voy caminando recuerdo todos esos momentos vividos con gran felicidad, como cuando nos bañamos durante más de una hora, sentados en la bañera mientras nos tirábamos espuma, mientras hacías el tonto para hacerme reír.
O tal vez, esos paseos de noche en la playa con nuestro niño, mientras me agarraba la mano el venía corriendo y nos mordía, o cuando tu y yo corríamos huyendo de él.
Por todas esas veces que me hiciste reír y no llorar, por todas esas veces que me has echo reir y despertar mi alma. TE QUIERO.
