lunes, 5 de septiembre de 2011

Todo igual.


El pasado vuelve. 

Me miro en el espejo, y me veo las ojeras de cada mañana, intento ponerme algo de maquillaje, para que no se den cuenta, y, lo consigo, consigo aparentar que soy inmune al dolor. A veces no sé que me da más miedo, si el dolor en si, o quizás el no sentir, el despertarte por la mañana poner los pies en el suelo y no saber que hacer, pensar sobre tu vida, sobre tu día y darte cuenta de la mierda de la rutina me está ahogando.

Rutina.

¡Suéltame! ¡Me estás ahogando!, joder, suéltame, tus brazos  me rodean el cuello haciendo que no pueda respirar....Dios, no paras...Sigues y sigues, cada día me aprietas más fuerte,... tengo miedo, como siempre, miedo al día que ya no pueda aguantar más... 

Me despierto, en medio de una pesadilla,  estoy sudando, estoy agitada. 

Como expresarte, como explicarme, que no acepto el dolor... Te echo de menos abuelita....